Mucho que hacer.

¿Lo estoy haciendo? Naaaaaaa. Estoy honrando a la sagrada actividad de la procrastinación. Carente de motivación quizás, o tal vez solo carente de ganas, me dispongo y escribo. Escribo, porque de eso si tengo ganas, mientras escucho la música que me reconforta medianamente esta noche, en los inicios de la primavera. Ahh la primavera, nada como el calor y la rinitis alérgica estacional. Recibiendo mensajes desde todas partes, los cuales no se si deba leer, o si acaso serán solo figuraciones de un subconsciente con demasiado tiempo libre, muy a mi pesar.

Así es. Muchos mensajes, y a su vez, nuevas y variadas situaciones angustiantes, que no todas son en torno a mí, sin embargo, las hago mías. Casi media semana laboral. Casi media semana de haber vuelto. Casi media semana de que otra vez te tengan por excelente o por incompetente, sin siquiera saberlo uno mismo.

Caramba, estoy escribiendo en la dulce lengua de Castilla, que ya no es de Castilla, de España, que ya tampoco es de España, sino que es de muchos países, entre ellos México, y que ya tampoco es de México, sino que es de cada quién, puesto que no a muchos entiendo, y si entiendo, es poco el entendimiento, o a veces, entiendo y entendemos de más.

Y es constante la búsqueda, puesto que si no fuera así, tal vez estaría muy contento, mediocrando la mediocridad. Pero no, estoy buscando, quizás de más, o quizás no lo suficiente. Y es así que me atrevo a escribir. A perpretar este texto, esta "entrada" como le llaman en ese Castellano que...blablabla.

Por eso me gusta poner mis fotos. A veces expresan más. Pero también se cada quién puede reflejar su ser en lo que fotografío. ¿Y acaso no en lo que escribo? Tal vez si. Esta conciencia global cada día nos alcanza más y más. Para bien, o para mal. No he tomado fotos....quiero tomar fotos. No tengo tiempo de tomar fotos. Ansío tomar fotos.

¿Buen fotografo? No hoy, no mejor que muchos, ni peor que otros tantos. Buena persona. No lo sé. Tal vez sea bueno, tal vez sea malo. Platón no me pudo dar la respuesta. Solo me hizo encontrarme con más preguntas. Kierkegaard hizo que buscar lo que soy se convirtiese en una máxima (y lo hizo con una sola frase). Sartre me dijo que dejara de quejarme, que siempre he sido y soy libre. Me duele la garganta y no he hablado. Me duelen los ojos y no he visto.

¿Qué es todo esto? ¿Sirve para algo, además de perder el tiempo que tendría que estar utilizando en labores más "productivas"? ¿Acaso sirve para arrancarles a mis lectores comentarios respecto a mi salud mental?

¿o es qué ni siquiera es necesario buscarle sentido u objeto, sino solo dejarlo ser?